Situado a orillas del lago, este magnífico parque de 8000 m2 fue un regalo de la ciudad de Lausana y de sus ciudadanos al Comité Olímpico Internacional (COI) y es la cuna del Museo Olímpico inaugurado en 1993.
Siguiendo el ejemplo de los jardines renacentistas, el recorrido de la visita va de abajo a arriba. Se va descubriendo de terraza en terraza siguiendo un camino largo de unos 1363 pies griegos, es decir, la longitud de un estadio.