Se pasa de un paseo umbrío, a macizos floridos o a un entorno encantador alrededor de una romántica fuente. Si desea sentir el pulso de una ciudad más bien afortunada contemplando una magnífica vista, debe venir aquí.
Dos imponentes edificios la coronan: el Casino de Montbenon, que acoge, entre otras cosas, la Cinemateca suiza, y el imponente Palacio de Justicia, de estilo renacentista.